Ya no quedan bestias negras

@11paresdebotas

Llegaba el Barça a Alicante con 14 victorias seguidas en Liga, pero con el recuerdo de su única derrota en la 2ª jornada ante el equipo de Esteban. Guardiola, siempre tan preocupado de los aspectos psicológicos, habló de la dificultad de la visita pero negó que fuera una espina clavada. En el estadio había una pancarta que daba la bienvenida a casa de su bestia negra, pero 90 minutos después no quedaba rastro de espinas ni de bestias negras.

Salió el Barça a dominar desde el inicio, y en la mitad de campo del Hércules se jugó el encuentro. Esteban mandó cerrar todos los pasillos interiores, con los dos medios centros muy cerca de los centrales, sabedor que lo más destacado de los catalanes es el triángulo Xavi-Iniesta-Messi. Eso hizo que la velocidad de balón no fuera excesiva aunque sí lo fue la posesión, abrumadora como siempre.

Tuvieron sus ocasiones Messi y Pedro, no demasiado claras, y siempre por fuera, llegando por el perfil izquierdo. Si esta vez el ritmo no fue intenso, era constante y el Hércules debía perseguir el balón y bascular de forma constante. Faltaba movilidad en los puntas de Pep y desmarques a la espalda de los centrales.

Mediado el primer tiempo, con un Hércules que no se había acercado a Valdés, y que a duras penas había sobrepasado el mediocampo, llegó la jugada que pudo ser clave en el partido. Un balón largo permitió a Valdez ganar la espalda de Abidal (central hoy ante la baja de Puyol), Piqué fue a cubrir su espacio y Valdez dejó la pelota para la llegada de cara de ,Trezeguet. Su remate, al borde del área chica, quizá intimidado por la salida de Victor no fue acertado y salió rozando el palo. Visto el desenlace posterior hay estuvieron las opciones de los alicantinos. Pudo ser el 1-0 y llevar los nervios a las filas blaugranas.

A partir de ahí el Barça continuó asociándose, trenzando pases y más pases, aprovechando su espectacular juego de posición, siempre hay opción para el jugador que tiene el balón. Y siempre hay ayudas para recuperarlo.

Las ocasiones ante el embudo que creaba el Hércules, llegaban gracias a las incansables subidas de Alves o a los errores provocados en la salida de los alicantinos. En uno de esos errores, al filo del descanso, el Barça se recuperó un balón y Xavi filtró un pase rápido al costado derecho, donde un impecable Pedro definió al palo corto tras un gran control. Un resumen del juego del Barça y una muesca más en la espectacular racha del canario. 1-0 merecido y descanso sin tiempo para más.

En la reanudación no cambió la tónica del partido, el Hércules era capaz de dificultar el juego del Barça, pero cada vez más incapaz de llegar al área de Valdés. Se anuló un gol a Villa, poco participativo hoy, y después otro, a Pedro y Messi puso a prueba a Calatayud con un disparo lejano. El argentino dio un espectáculo de desmarques y de juego de asociación, encontrado siempre entre líneas un espacio para recibir y dar continuidad a las jugadas.

A falta de 25 minutos Esteban sacó a Farinós buscando el revulsivo, el valenciano fue clave en el ascenso y llevaba toda la temporada lesionado, pero es un ídolo en el Rico Pérez. Salió con todas las ganas del mundo, intenso, pero lejos de cambiar la cara al partido, su intensidad le llevó a cometer 2 faltas innecesarias en pocos minutos y dejó a su equipo con 10.

En ese espacio que quedó entre los centrales apareció Messi. Hizo la pared con Xavi, regateó a 2 rivales y remató cruzado golpeando el palo y anotando el 2º. La sentencia. Una jugada tan típica de la Pulga, tan repetida, que acaba por hacernos darla por sentada, pero una jugada que sólo un genio puede repetir en cada partido, incluso varias veces en cada partido. Como dice Xavi, está por encima de todos.

Llegaron los cambios de Guardiola. Que dió unos minutos a Nolito, reclutado tras la baja de Bojan, a Afellay y Keita. Cambios testimoniales ya.

El partido lo cerró el Barça con una de esas jugadas casi de balonmano, tocando de izquierda a derecha por toda la frontal del área hasta que aparece el pase en profundiad. El indesmayable Alves agregó una asistencia más a su cuenta cediendo para que en boca de gol Messi marcara su gol 21 en esta Liga.

El Barcelona ha sumado así 15 triunfos seguidos e iguala el récord que poseía el Real Madrid desde 1960-61. Sólo el Hércules ha ganado al Barça en esta Liga, pero esta noche el rodillo azulgrana venció a su bestia negra.